Está ubicada en Francia al 1000, entre las calles Sdor. Morón y Francisco Bourel. El Funcionamiento es simple: quien esté interesado se puede llevar un libro a elección, con la única condición de dejar uno a cambio. Así, la rueda se autoabastece y nunca falta material literario para escoger en la Biblioteca popular libre.
Arrancó a principios de año, era una pequeña casita pintada a mano la cual guardaba poco mas de una docena de libros de diverso genero. Desde las fascinantes travesías de Julio Verne, pasando por Libros escolares y también Ernesto Sábato con sus fantasmas de Santos Lugares, Como todo lugar tuvo actos vandalicos y robos, Pero hoy la apuesta se redobló La creadora de esta biblioteca expandió el lugar donde se alojan estos libros
La idea se originó en chicago bajo el nombre “Free Library” en 2009 por Todd Boll, un estadounidense que decidió rendir tributo a su lectora madre mediante la implementación del sistema. Bajo el lema “Toma un libro, deja otro” (“Take a book, return a book”) la idea fue expandiéndose hasta llegar a las páginas del prestigioso diario “Wall Street Journal” que definió a la propuesta como una “sensación global”. (Foto: Twitter)
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